Los deportes de invierno, tradicionalmente limitados a regiones frías, han experimentado una notable expansión global gracias a avances tecnológicos y un creciente interés en estas disciplinas. La invención de nieve y hielo artificial ha permitido que actividades como el esquí, el snowboard y el patinaje sobre hielo se practiquen en una variedad más amplia de ubicaciones y durante períodos más prolongados.
Según un informe de Business Research Insights, el mercado mundial de tablas de esquí y snowboard alcanzó un valor de US$1,540 millones en 2023 y se proyecta que llegará a US$2,070 millones en 2032, con una tasa compuesta de crecimiento anual (CAGR) del 3.3%. Este crecimiento es impulsado por el auge del turismo invernal, el desarrollo de estaciones de esquí y la popularidad de estos deportes entre diversas generaciones.
Además, «Informes de Expertos» señala que el mercado del esquí alcanzó un valor de US$1,700 millones en 2024 y se espera que crezca a una CAGR del 3.2% hasta 2034, alcanzando los US$2,260 millones. Esto refleja una demanda constante de equipos especializados y la consolidación del esquí como una de las disciplinas más rentables dentro de los deportes de invierno.
El mercado de equipos para deportes de invierno también está en expansión. Statista proyecta que generará ingresos de US$15,000 millones en 2025, con una tasa de crecimiento anual del 3.57% entre 2025 y 2029. Estados Unidos lidera este mercado con una contribución estimada de US$3,111 millones en 2025. Sin embargo, a pesar de este crecimiento global, los países tropicales aún representan un mercado limitado para este tipo de equipamiento, debido a su clima y la falta de infraestructuras adecuadas.
Entre las disciplinas más practicadas se encuentran el esquí, el snowboard, el alpinismo y el patinaje sobre hielo. El esquí, considerado el deporte de invierno por excelencia, ofrece diversas modalidades, desde el esquí alpino hasta el esquí de fondo, lo que contribuye a su amplia aceptación y práctica en diferentes regiones.
En resumen, los deportes de invierno están experimentando una expansión significativa y ofrecen oportunidades de inversión rentables, impulsadas por la innovación tecnológica y una creciente demanda a nivel mundial.